Por; Dr. Julio Noyer
Vivimos en un mundo donde la guerra, el poder y la destrucción nos definen más que la compasión, la paz y la unión.
¿Qué pasaría si una fuerza externa, más poderosa que nosotros, llegara y nos esclavizara?
¿Si los mismos seres que miramos con esperanza en el cielo se convirtieran en un reflejo de lo que somos, pero sobre nosotros mismos?.
La humanidad ha demostrado su capacidad para crear y destruir. Pero, en su lucha interna, olvida su mayor lección: que estamos juntos en este planeta.
Si algún día enfrentáramos una amenaza extraterrestre que nos esclavizara, ¿cuánto desearíamos haber valorado nuestra libertad, nuestra diversidad y nuestra coexistencia antes de perderlas?.
Esta idea no es un deseo de castigo, sino una llamada a la reflexión:
- Si podemos unirnos bajo una causa común en la ciencia o en la supervivencia, ¿por qué no podemos hacerlo por la paz?
- Si somos capaces de imaginar un futuro sombrío, ¿por qué no trabajamos para evitarlo desde ahora?.
- El verdadero desafío no está en lo que harían «ellos» con nosotros, sino en lo que nosotros podemos hacer con nuestra propia humanidad antes de que sea demasiado tarde.
- Hoy es el momento de cambiar, de demostrar que somos más que nuestra historia de conflictos.
- No necesitamos una invasión para recordarnos que el poder más grande que tenemos capacidad de elegir la paz.